El nombre científico del
tomillo procede de la
palabra griega
thym, que significa perfumar, lo que ya nos da una
idea de lo aromática que es esta planta. El tomillo es un arbusto de
hoja perenne de hasta 50 cm de altura, con unas características
flores muy pequeñas, normalmente de color blanco. Su cultivo es muy
sencillo ya que no es nada exigente en cuanto a la calidad de la
tierra y resiste muy bien la falta de agua.
El tomillo tiene cualidades tanto
terapéuticas como culinarias. Desde tiempos de los romanos el
tomillo ya era utilizado para condimentar las comidas, costumbre que
ha llegado hasta nuestros días. En cuanto a las cualidades
terapéuticas del tomillo, destacan sus propiedades antisépticas,
balsámicas, estimulantes del apetito y cicatrizante de pequeñas
heridas.
Y en la siguiente foto podemos ver tomillo como el que podemos comprar en las herboristerias listo para su consumo:
Tomado en infusión, añadiéndole algo de limón y miel, es un buen método para aliviar los catarros y resfriados.
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