Planta crasa procedente de las laderas
secas y calurosas del sur de México y Honduras. Tiene unos largos
tallos de hasta casi un metro de largo que suelen utilizarse para
fines decorativos cuando se coloca al sedum en una maceta colgante.
Estos largos tallos están cubiertos de hojas en forma de pequeños
bulbos de entre 1 y 2 centímetros de grosor. Las hojas, de un color
verde pálido, son muy delicadas y pueden desprenderse del tallo ante
cualquier movimiento brusco de la maceta. Cuando la planta haya
llegado a su etapa de madurez y tenga ya un tamaño considerable dará
unas pequeñas flores rosadas en los extremos de los vástagos.
La sedum morganianum ha de estar bien
iluminada durante todo el año y se la ha de regar moderadamente o de
lo contrario se le caerán las hojas. Puede aguantar heladas
moderadas, por lo que puede tenerse a la planta en el exterior
durante todo el año en zonas de temperaturas no muy extremas. Para
reproducir a nuestra sedum podemos utilizar las hojas y tallos que se
vayan cayendo de la planta.
Cuando los tallos de la sedum morganianum crezcan más, colgarán de manera muy vistosa.
Las hojas del sedum son muy delicadas y se caerán si se mueve mucho la planta o por un riego inadecuado.
Lo bueno es que podemos utilizar estas hojas caidas como esquejes para multiplicar nuestro sedum morganianum, ya que arraigan con gran facilidad.
Las pequeñas flores crecen en grupos en los extremos de los tallos.
Lo bueno es que podemos utilizar estas hojas caidas como esquejes para multiplicar nuestro sedum morganianum, ya que arraigan con gran facilidad.
Las pequeñas flores crecen en grupos en los extremos de los tallos.
Está mal identificada. No es sedum morganianum!
ResponderEliminarEstá mal identificada. No es Sedum Morganianum
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