Esta suculenta crece lentamente en forma de pequeños arbustos de unos 10-12 cm. de alto. Los tallos suculentos tienen una forma parecida a la de una almendra y están recubiertos por una superficie rugosa (que podría recordarnos a un coral, de ahí su sobrenombre) de color variable. Comienzan siendo verde claro y a medida que van creciendo van tomando un color rojizo o parduzco. Necesita un sustrato calizo y bien drenado, similar a la zona de rocalla en la que crece en su hábitat natural y riegos poco abundantes.
La Adromischus marianae o red coral es una suculenta muy popular como planta ornamental por su peculiar aspecto.
Aquí el adromischus marianae ya ha adquirido su característico color rojo.
Y aquí la planta en período de floración.